"Mando único o justificación única".

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Por Enrique Silva M.

Si bien es cierto que ya no es frecuente toparse con escenas sangrientas y de excesiva violencia como ocurrió en los momentos álgidos de violencia en el puerto, según las autoridades por la pelea de la plaza -y por cierto igual que ahora se hacían a un lado y se justificaban con ello-entre grupos antagónicos de la delincuencia, hoy día los acapulqueños vuelven a platicar y peor aún a vivir escenas de terror cuando de repente son abordados por gente armada en sus automóviles para ser privados de la libertad por algunas horas en lo que les vacían las tarjetas de crédito, les quitan todo lo de valor y el automóvil o piden una cantidad de rescate a sus familiares a cambio de respetar sus vidas con un famoso secuestro exprés.

Obvio es que la estadística de las autoridades no coincide con lo señalado, porque la ciudadanía sigue desconfiando de la autoridad, no quiere perder tiempo en el mundo de la burocracia o no está dispuesta a perder más dinero con quienes nos debieran ayudar.

La ausencia de policías locales ha convertido a Acapulco en tierra fértil para la delincuencia, no sé si llamarla común, lo que sé es que si es común que la delincuencia organizada o no haga de las suyas ante la actitud omisa e irresponsable de las autoridades.

El repetido anuncio del "Mando Único Policiaco" sólo significa una esperanza para la ciudadanía y me atrevo a decir que sólo en eso quedará mientras no se depure también a los órganos impartidores de justicia que es donde muchas veces topa toda buena intención por castigar a quienes delinquen. no se pueden hacer cosas a medias, para obtener resultados en combate a la delincuencia y prevención del delito se requiere de una gran coordinación entre los tres órdenes de gobierno, esa coordinación tan cacaraqueada, pero que todos sabemos no existe, porque además salta a la vista.